Planificación y Desarrollo Sostenible
- pilares de una Sociedad organizada y equitativa -
El ser humano en su organización social requiere de pautas y procedimientos que le permitan una convivencia y desarrollo en armonía, equidad y calidad de vida. Sin embargo, estas metas no se cumplen de forma espontánea por el solo hecho del nucleamiento social. La definición de ejes estructurales de desarrollo requiere del estudio de sus características particulares, sus potencialidades locales y su interrelación a nivel sectorial y regional.
En nuestro país, que cuenta con un territorio sumamente extenso y diverso, y considerando nuestro principio constitucional Federal, resulta imprescindible trabajar con dichos criterios. Los veinticuatro estados que lo integran cuentan con capacidades y recursos propios que no pueden ser menospreciados y, menos aun, desvinculados del resto de las jurisdicciones que en su conjunto, constituyen orgullosamente nuestra Nación.
Todas y cada una de las capacidades deben ser parte de una complementación, sin subordinación, en el respeto de la equidad que hace a nuestro principio rector constitucional.
Es bajo estos conceptos que nuestra Nación debe basar los criterios de planificación, enfatizando las articulaciones hacia las regiones postergadas, otorgando posibilidades de progreso y calidad de vida en forma equilibrada y sin diferencia en las acciones a emprender.
La responsabilidad del estado en cuanto a los modelos de urbanización, eficientes, sostenibles, con articulación público – privada, asumiendo las responsabilidades que a cada campo le compete, resulta imprescindible e ineludible en la etapa que debemos transitar.
La vinculación y relación interjurisdiccional debe ser una vía de facilitación y cooperación, no una frontera o impedimento para el desarrollo y la convivencia. Infraestructura de servicio, sistema vial, vivienda, acceso a la tierra, ordenamiento territorial, entre otros, deben conformar la base de la relación. La Nación debe ser una orquesta con 24 intérpretes en el marco de una partitura: “La Nación Argentina”.
Por último, un tema no menor a tener en cuenta en todo lo atinente a la planificación y desarrollo es el cuidado, preservación y consideración de nuestra casa común, “La Tierra”. Todo lo que decidamos debe preservar el ámbito natural, evitando impactos que degraden o afecten el ambiente, respetando lo establecido en nuestra constitución, tratados internacionales y que recientemente enfatizara con profundo respeto y conciencia en la Carta Encíclica “Laudato Si´”, el Santo Padre Francisco. |